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«Siempre me han fascinado las relaciones, observar en detalle y desde los márgenes las particularidades que sucedían a mi alrededor. La psicología ha sido y es para mi un tobogán hacia fuera, un medio para poner en acción mis inquietudes y una oportunidad para pasar de los márgenes a vivir en los entrelugares, en ese «entre tú y yo» en el que se da la experiencia.
El proceso terapéutico es una oportunidad para asomarse a la relación con todo lo que una trae, mirar la historia con apoyo y encarnar en primer plano eso que hace que nuestra vida tenga verdadero sentido. Es en la interacción donde aparece la dificultad y también la posibilidad de cambio.»